INCANSABLE

Está empeñado. No se da por vencido. Aunque es una tarea enorme y para la que hace falta gente especial.
Y no se cansa, insiste una y otra vez. Y eso que son cosas que me quedan grandes y para las que me veo incapaz.
Pero sigue y vuelve a la carga. A pesar de que me hago el remolón y miro para otro lado.
Y ya está otra vez de nuevo. Incansable. Y eso que meto la pata y parece que me empeño en demostrar que no valgo.
Pero… Él me sigue llamando.

Por Javier Montes sj

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *