Nuevo curso pastoral en la PAL de Salamanca

El domingo 1 de octubre quedó inaugurado el curso Pastoral 2017-2018 con una Eucaristía en la que participaron todas las obras de la Plataforma Apostólica de Salamanca.
 
 
Deseo manifestado en la celebración es ponernos delante del Señor, para agradecerle todo lo que hemos recibido de él. Venimos de una historia, en la que a lo largo de los años se han ido gestando lazos de confianza en torno a la parroquia “El Milagro”, al Colegio San Estanislao, al Centro de Espiritualidad, a Entreculturas, a la Red Ignaciana de Solidaridad (RIS), y a la Comunidad de Vida Cristiana (CVX).
 
Nos sentimos como una gran comunidad de personas que aprecian el regalo de vivir en esta ciudad, en la que podemos disfrutar de la cercanía física de unos con otros, y de sentirnos con una gran sintonía fruto del espíritu.
 
Entre todos; jóvenes, adultos y mayores, jesuitas y laicos se han ido forjando redes de solidaridad, que nos han llevado a soñar juntos e ir creando proyectos comunes. Estos proyectos se concretan en la vida más cotidiana de cada una de las instituciones, pero también nos conducen a salir de nosotros mismos y a querer ofrecer a otros lo que el Señor nos regala, sobre todo a los más desfavorecidos tanto de nuestro entorno, como a los que más allá de nuestras fronteras viven situaciones de gran dificultad.
 
Desde lo que somos miramos al futuro con esperanza, ilusionados con el sueño que Dios sueña en nosotros. Por ello este día le pedimos que nos enseñe sus caminos.  Unos caminos que nos animan a dar vida y alegría a otros.
 
El Señor nos invita a mantenernos unánimes y concordes con un mismo amor y un mismo sentir. Y sobre todo a que, desde el Espíritu que nos mantiene unidos, tengamos entrañas de misericordia, para no encerrarnos en vuestros intereses, sino para buscar el interés de los demás.
 
Con este deseo y estos sueños iniciamos el curso, queriendo poner en obra todo esto que Dios nos pide. Porque sabemos que el amor hay que ponerlo más en las obras que en las palabras.
 

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