XXIII DOMINGO del Tiempo Ordinario

Mateo 18, 15-20
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Si tu hermano comete un pecado, ve y amonéstalo a solas. Si te escucha, habrás salvado a tu hermano. Si no te hace caso, hazte acompañar de una o dos personas, para que todo lo que se diga conste por boca de dos o tres testigos. Pero si ni así te hace caso, díselo a la comunidad; y si ni a la comunidad le hace caso, apártate de él como de un pagano o de un publicano. Yo les aseguro que todo lo que aten en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo. Yo les aseguro también que si dos de ustedes se ponen de acuerdo para pedir algo, sea lo que fuera, mi Padre celestial se lo concederá; pues donde dos o tres se reúnen en mi nombre, ahí estoy Yo en medio de ellos”.

Orar en Domingo:

Lo que atareis en la tierra. Autoridad colegiada en la Iglesia, por Xabier Pikaza

Si tu hermano te hace algo malo… por Hermann Rodríguez Osorio sj

Reunirse en el nombre de Jesús, por José Antonio Pagola

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *