El pasado sábado 8 de junio, la CVX en Tenerife vivimos una jornada especial. La “Casa Manresa” nos albergó esta vez para celebrar la “asamblea de final de curso” en la que todos los años y antes del verano, hacemos una evaluación de la marcha de la comunidad, una especie de “tomarnos el pulso” comunitariamente, contemplando el camino recorrido y mirando a la vez los posibles senderos por donde el Señor puede llevarnos. Además decidimos el destino de los fondos aportados entre todos durante el año anterior apoyando un proyecto de solidaridad externo (de fuera de nuestro país) y otro interno (de nuestra realidad local). También tratamos de otras cosas más prosaicas y hasta a veces “enojosas” pero necesarias, como es el estado económico de la comunidad.
En esta ocasión vivimos un momento muy especial en la Eucaristía del día, presidida por nuestro asistente Pedro Cambreleng sj. Nada más y nada menos que nuestros compañeros Alejandro, Lali, Noelia y Javier Hernández formularon su compromiso temporal. Además Ana Mª. Fuentes, Javier Teixidor y Mercedes lo renovaron. Es una gran alegría ver como el Señor va trabajando en las personas y te va haciendo ver, descubrir y “caer en la cuenta” de esta vocación que es un regalo suyo para seguirle en la Iglesia. Percibimos que desde hace algún tiempo y desde el último año tal vez más intensamente, hemos madurado comunitariamente, abordamos ciertos temas con mayor madurez y profundidad, entendemos mejor conceptos que no son sólo “de cabeza” sino de corazón e ilusión como “pertenencia y vinculación a la CVX” y sin dejar de ser conscientes de nuestras limitaciones esperamos confiados que el Señor nos lleve a ser más “apostólicos” que es la razón de ser de la CVX.
Por todo ello mil gracias Señor.
Pedro Alonso, Presidente CVX-Tenerife
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