El sábado 16 de diciembre la comunidad de CVX en Valladolid nos reunimos para celebrar juntos la proximidad de la Navidad y agradecer lo vivido en este primer trimestre del curso. Si una palabra puede resumir esa tarde, sería “compromiso”. En primer lugar, porque en el fondo de todo lo compartido está un Dios que se compromete con el mundo y se encarna en un niño recordándonos que Él siempre está a nuestro lado y que nuestra fe no puede estar desconectada de lo que pasa en ese mundo.

Desde ahí tienen sentido los testimonios que varias personas de la comunidad nos compartieron sobre algunos de los campos de misión de la comunidad, en concreto los de familia, migraciones y espiritualidad. Nos ayudaron a ponernos al día de las muchas iniciativas que están promoviendo los Equipos de Misión a nivel nacional y a sentirnos partícipes de cómo nuestra comunidad aterriza en personas y actividades concretas las llamadas que recibe de Dios a estar cerca de los pobres y los necesitados. Esta primera parte de la tarde se cerró con un pequeño rato de charla con nuestro presidente nacional, Eduardo Escobés, en la que nos acercó la realidad de CVX a nivel nacional y mundial, con una llamada explícita a tener una presencia y palabra activas en nuestra Iglesia.

A continuación, celebramos la Eucaristía en la que tuvimos un sencillo gesto de bienvenida con los miembros del grupo de acogida que se incorporan a la comunidad y en la que Cristina y Maribel explicitaron sus Compromisos Temporal y Permanente respectivamente. Un momento emocionante que fue sobre todo una acción de gracias por lo mucho recibido en este tiempo a través de la comunidad, y la expresión del deseo de seguir apostando por este modo de seguir a Jesús en comunidad. Para todos los que les acompañamos fue también ocasión de renovar nuestra vinculación a CVX y recordarnos que estamos llamados a vivir un compromiso en el día a día de nuestras familias, ocupaciones y voluntariados.

Roberto Arnanz

CVX en Valladolid